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El “circo” que está montando el PP por su lucha por el poder entre Ayuso y Feijóo, demuestra que sus propias falacias, trampas y compra de voluntades políticas y utilización de las instituciones para sus egos y aumento económico les ha estallado en sus propias narices. No han tenido bastante con comprar, desde hace tiempo, como el caso del Tamayazo, de forma” fraudulenta” a diputados para mantener gobiernos autonómicos e incluso intentar “humillar” y quitar derechos a los trabajadores “confabulando” con diputados “tramposos” y con alevosía, para ganar votaciones si les perjudica a sus intereses personales.
No sé a quién quiere engañar el PP con sus principios. Pues sus principios son: prevaricar, corrupción, compra de voluntades políticas y lo peor, la mentira continua, el insulto y la humillación a todos y todas los que pensamos contrarios a ellos. La democracia la utilizan y no les importa nada. Y menos los valores que conllevan. Son anti patriotas aunque se enarbolen en la bandera y antisociales pues están en el no, por el no. Y lo peor, lo que ha sucedido estos días, ha demostrado que no tienen ningún miramiento por esconder sus principios, utilizando a la justicia para expandir sus bulos, con el fin de conseguir debilitar al presidente de Gobierno, elegido democráticamente.
Es posible que todo el PP no sea igual y tengo seguro que la gran mayoría de los votantes del PP, no tienen los principios de esos dirigentes, por eso cada vez comprendo menos, pero lo acepto como demócrata, que se les vote. Puesto que los dirigentes se apoyan en unos principios falaces. Y lo peor se escudan en unos postulados que ni ellos mismos se creen. En nuestra democracia sobran los infantilismos, vengan de donde vengan, y la falta de madurez política y también sobran aquellos y aquellas que piensan que por pensar distinto deben ser excluidos.
Y por desgracia los dirigentes actuales del PP son generadores de odio y crispación y promotores de las dos Españas. Solo existe una, con sus nacionalidades, sus lenguas, sus diversidades y sobre todo sus libertades expresivas y constitucionales.
Por eso, ¿a quién quiere engañar este PP con sus principios?
¿A quién quiere engañar el PP, cuando en su discurso anti populista utiliza el populismo verbal para alterar el pensamiento de la ciudadanía?
¿A quién quiere engañar el PP con su critica a Vox, cuando gobierna con él e incluso apoya en muchas de sus medidas anti democráticas?
¿A quién quiere engañar el PP, cuando defiende la Constitución y ellos incumplen en algunas comunidades donde gobiernan la constitución continuamente?
¿A quién quiere engañar el PP, cuando se han opuesto una y otra vez,al gobierno legítimamente salido de las urnas y no ha propuesto ninguna propuesta, para mejorar la vida de los ciudadanos y ciudadanas?
¿A quién quiere engañar el PP de que están con lo público, cuando son capaces de ocultar los éxitos de lo público con el fin de que se vea la necesidad de que hay que privatizar y de indicar que lo privado es más práctico que lo público?
¿A quién quiere engañar el PP cuando intenta comparar el “rodea el congreso” con el intento golpista de Trump?
¿A quién intenta engañar el PP, con su ética falaz, cuando continua privatizando y dando a dedo concesiones, como ha hecho y hará siempre que ostenta poder?
Basta ya de engaños, no somos ignorantes. Nuestra democracia necesita de verdades y no de engaños y conociendo, aceptando que otros partidos, también de izquierdas pueden mentir, lo que el PP está haciendo raya el esperpento, el delito, la postura más canallesca de la política y ponen en jaque los verdaderos valores de la democracia, que todos los partidos deben defender y que toda la ciudadanía, debemos respetar desde donde nos encontremos.
