Durante la dictadura argentina un cadáver apareció al pie del obelisco bonaerense. ¡Un cadáver en el centro de Buenos Aires a la vista de todos!
La política, como la física, tiene leyes que no se pueden infringir, o al menos, no se pueden infringir impunemente.
Discurre la esgrima de la vida pública entre pronombres políticos que sustancian un voluntarismo excluyente.
Noam Chomsky nos advierte que si no creemos en la libertad de expresión para la gente que despreciamos, no creemos en ella para nada.
El “momento maquiavélico” es definido por el historiador Pocock como el instante de crisis en la relación entre personalidad individual y sociedad, virtud y corrupción.
Un gobierno que trascienda a la mera acepción y sea capaz de construir procesos de transformación social.
La democracia británica descansa en una sana paradoja: “we agree to disagree” (nos ponemos de acuerdo para discutir).
Los silenciosos deben tener voz, la voz de un partido socialista que retome la ideología de la igualdad, la justicia y la solidaridad
Como el viejo coronel, los máximos dirigentes socialistas han bajado al muelle donde llegan las lanchas con la correspondencia para ver si cambiaba su suerte.