domingo. 30.06.2024
Autorretrato, del año 1635, óleo sobre lienzoNational Gallery of Art, Washington

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Fue un pedazo de artista del Siglo de Oro holandés. Sin embargo, su condición de mujer fue un lastre para su carrera y durante siglos sus extraordinarias pinturas fueron atribuidas a sus coetáneos, como fueron Frans Hals o incluso el marido de Leyster, Jan Miense Molenaer.

Nace en Harlem el veintiocho de julio del año 1609 en una familia burguesa. Fue la octava hija de Jan Willemsz Leyster, que era un cervecero y sastre local. Si bien los detalles de su formación no son muy conocidos.

Ya era una mujer reconocida en su juventud pues fue mencionada en el libro de Samuel Ampzing “Beschrijvinge ende lof der stadt Haerlem”, escrito originariamente en el año 1621, siendo revisado entre los años 1626 y 1627, y publicado en el año1629.

Judith desarrolló su carrera como pintora ante la necesidad de aportar dinero a la familia como resultado de la bancarrota de su padre. Podría haber aprendido pintura con Frans Pieters de Grebber, quien dirigía un respetado taller en Harleem en la década del año 1620. Su familia se trasladó a Utrecht, donde entró en contacto con los caravaggistas de la ciudad en estos años.

Murió en el año 1660, a la edad de cincuenta años. Fue enterrada en una granja a las afueras de Harlem. Ninguna de sus obras de arte se mostró públicamente ni se le atribuyó durante cerca de 200 años

Se especializó en alegres escenas de género, músicos, bebedores en tabernas, niños... gente sonriente o divirtiéndose. Era lo que se compraba en esa época por parte de los ricos holandeses. Tenía también escenas domésticas como mujeres en labores del hogar.

Su primer trabajo firmado data del año 1629, “Serenade y Jolly Topper”, cuando Judith artista tenía veinte años y cuatro años antes de ingresar en el gremio de artistas. Era miembro de la guilda de San Lucas de Haarlem en el año 1633.

Serenata de Leyster, del año1629
Serenata de Leyster, del año1629

Existe cierto debate acerca de quién fue la primera mujer registrada en el gremio, pues algunas fuentes indican que fue Judith, inscrita en el año 1633, y otras que lo fue Sara van Baalbergen en el año 1631.

Judith se casa con Molanaer en el año 1636, que era un pintor con mucho menos talento, pero que pintaba temas semejantes. La obra de esta pintora fue durante muchos años erróneamente atribuía a su marido Molanaer.

Decenas de otras artistas mujeres podrían haber sido admitidas en el Gremio de San Lucas durante el siglo XVII. Sin embargo, como a menudo no figuraba el medio en el que trabajaban, es difícil determinar cuántas eran pintoras.

Las artistas que trabajaban en oficios llamados menores como eran el bordado, la pintura de cerámica, el metal y la madera estaban incluidas en gremios, y algunas continuaban el trabajo de sus maridos difuntos.

Dos años después de entrar en el Gremio, había contratado a tres aprendices masculinos. Los registros muestran que Judith demandó a Frans Hals por aceptar a una estudiante que dejó su taller para ir al suyo sin obtener antes el permiso del Gremio.

La pareja feliz de Leyster, del año 1630. Museo del Louvre
La pareja feliz de Leyster, del
año 1630. Museo del Louvre

La madre del estudiante le pagó cuatro florines en indemnización punitiva, sólo la mitad de lo que Judit le demandó y Frank Hals resolvió su parte de la demanda pagando una multa de tres florines en lugar de devolver el aprendiz.

La propia Judith fue multada por no haber registrado a su aprendiz en el Gremio. Tras su demanda con Frans Hals, las pinturas de Judith alcanzaron un mayor reconocimiento artístico y económico.

El autorretrato de Judith del año 1633, “Leyster's Self-Portrait” que se encuentra en la Galería Nacional del Arte en Washington, se ha especulado con que fuese el cuadro que le sirviera de presentación para el gremio. Este trabajo marca un cambio histórico con el abandono de la rigidez de los autorretratos femeninos a favor de una pose más relajada y dinámica. 

Su actitud es muy relajada según los estándares de cualquier retrato holandés y comparable principalmente con algunos retratos de Frank Hals. Si se analizan los ropajes, cómo en aquella época se solían retratar, son trajes y complementos elegantes, mostrando estatus y dignidad para su profesión.

Como hemos visto, se casó con Jan Miense Molenaer, un pintor más prolífico, aunque con menos talento, que se dedicó a temas similares. Se trasladaron a vivir a la ciudad de Amsterdam para mejorar económicamente, dado que allí el mercado de arte era más estable. 

Pintó pocos retratos reales, y su única pintura de historia conocida es “David con la cabeza de Goliat”, que no se aparta de su estilo típico, con una sola figura cerca del frente del espacio de la imagen

La proposición de Judith Leyster
La proposición de Judith Leyster

Permanecieron allí durante once años antes de regresar a Heemstede en la zona de Haarlem. Allí compartieron un estudio en una pequeña casa situada en el actual parque Groenendaal. Judith y Molenaer tuvieron cinco hijos, de los que sólo dos alcanzaron la edad adulta.

La mayoría de las obras fechadas de Leyster son entre los años 1629 y 1635, antes de casarse y tener hijos. Hay pocas piezas conocidas pintadas después del año 1635.

Hay dos ilustraciones en un libro sobre tulipanes del año 1643, un retrato del año 1652 y una naturaleza muerta del año 1654, que fue descubierta recientemente en una colección privada. Judith también pudo haber trabajado en colaboración con su esposo.

Judith firmó sus trabajos con un monograma formado por sus iniciales JL con una estrella adjunta como en un juego de palabras. Significaba "estrella líder" en holandés y era para los navegantes holandeses de la época el nombre común de la estrella polar. Leystar era el nombre de la cervecería de su padre en Haarlem. Solo ocasionalmente firmó sus trabajos con su nombre completo.

Se especializó en escenas de género donde aparecían en sus cuadros de una a tres figuras, que normalmente tenían un aspecto siempre optimista y se muestran en un contexto sencillo, que generalmente desprenden alegría y se muestran sobre un fondo sencillo. Muchos son niños y otros son hombres bebiendo. Muchos son niños o niñas, músicos, hombres con bebida.

Judith fue particularmente innovadora en sus escenas de género domésticas. Estas son escenas íntimas de mujeres en el hogar, a menudo con velas o lámparas, evocando el punto de vista femenino.

En su obra “Hombre ofreciendo dinero a una mujer joven” es una variante inusual en estas escenas, mostrando a una muchacha que se muestra indiferente a las proposiciones y monedas de un hombre en lugar de representar a una prostituta voluntaria, la escena más habitual bajo este título. Lo frecuente en aquella época era representar a una prostituta dispuesta.

El hecho de que el sujeto femenino esté cosiendo en la escena también puede tener un doble significado, puesto que la palabra holandesa para coser a veces se utiliza como metáfora del sexo.

Judith desarrolló su carrera como pintora ante la necesidad de aportar dinero a la familia como resultado de la bancarrota de su padre

Sin embargo, esta interpretación no es universalmente aceptada. Ann Sutherland Harris ha interpretado la pintura como una mujer que recibe una propuesta de matrimonio honesta.

Gran parte de su obra, especialmente centrada en músicos, era similar en naturaleza a la de muchos de sus contemporáneos, como su esposo Molenaer, los hermanos Frank y Dirck Hals, Jan Steen, y los caravaggistas de Utrecht, Hendrick ter Brugghen y Gerrit van Honthorst. 

Sus pinturas de género abarcaban tabernas y otras escenas de entretenimiento, que satisfacían los gustos e intereses de un segmento creciente de la clase media holandesa que se enriquecía a través del comercio.

Pintó pocos retratos reales, y su única pintura de historia conocida es “David con la cabeza de Goliat”, que no se aparta de su estilo típico, con una sola figura cerca del frente del espacio de la imagen.

Un niño y una niña con un gato y una anguila, óleo sobre tabla, National Gallery, Londres
Un niño y una niña con un gato
y una anguila, óleo sobre tabla, 
National Gallery, Londres

En el año 1648, Theodore Schrevel, que era un comentarista holandés, escribió: "También ha habido muchas mujeres experimentadas en el campo de la pintura que todavía son reconocidas en nuestro tiempo, y que podían competir con los hombres. Entre ellas, una destaca excepcionalmente, Judith Leyster, llamada 'la verdadera estrella principal del arte'".

Aunque conocida durante su vida y estimada por sus contemporáneos, Judith y su obra se olvidaron en gran parte después de su muerte. Su redescubrimiento se produjo en el año 1893, cuando se supo que una pintura admirada durante más de un siglo como obra de FranskHals había sido pintada por JudithLeyster.

En el año 1964, Whitney Chadwick cita a James Laver en su encuesta “Women, Art, and Society” diciendo que algunas mujeres artistas tienden a emular a Frans Hals, pero las pinceladas vigorosas del maestro estaban más allá de su capacidad. Sólo hace falta mirar la obra de una pintora como Judith Leyster para detectar la debilidad de la mano femenina.

La confusión, o quizás el engaño, puede proceder de la vida de Leyster. Sir Luke Schaud adquirió un Leyster, The Jolly Companions, como Hals en la década de 1600. La obra acabó llegando a un comerciante, Wertheimer de Bond Street, Londres, que la describió como una de las mejores pinturas de Hals.

Un juego de cartas, óleo sobre tela, colección privada
Un juego de cartas, óleo
sobre tela, colección privada

La confusión se remonta a la vida de Leyster. Luke Schamb adquirió un cuadro de Leyster en el año 1868, “La alegre compañía” que se expone en el museo del Louvre en Paríscomo si fuese un Hals. La obra pasó al comerciante de arte Wertheimer de Bond Street, Londres, quien la describió como una de las mejores pinturas de Hals.

John Millars estuvo de acuerdo con Wertheimer sobre la autenticidad y el valor de la pintura. Wertheimer vendió la pintura a una firma inglesa por £ 4,500. Esta empresa, a su vez, vendió la pintura como un Hals al barón Schlichting en París.

El museo parisino del Louvre encontró en el año 1893, el monograma de Leyster bajo la firma falsa de Hals. No está claro cuándo se agregó la firma falsa. Cuando se descubrió la firma original, el Barón Schlichting demandó a la firma inglesa, que a su vez intentó rescindir su propia compra y recuperar su dinero del comerciante de arte, Wertheimer.

El caso se resolvió a través de un proceso judicial, el treinta y uno de mayo del año 1893 y los demandantes acordaron mantener la pintura por un valor de 3.500 libras más otras 500 libras. 

Flores en jarrón del año 1654
Flores en jarrón del año 1654

Durante el proceso, no se consideró la obra como una pieza de valor dada su nueva atribución. No se tienen indicios de que se valorara el descubrimiento inesperado de esta artista, capaz de igualar a Hals en su mejor momento. Otra versión de la “Alegre compañía”, vendida en Bruselas en el año 1890 llevaba el monograma de Judit Leyster pero que llevaba la firma falsa de una FH entrelazada.

Cornelis Hofstede de Groot escribió el primer artículo sobre Judith Leyster en el año 1893. Desde la historia del arte se la ha clasificado como imitadora o seguidora de Hals, aunque esta interpretación está cambiando en los últimos años.

Entre los museos que conservan obras de Judith Leyster se cuentan el Rijksmuseum de Ámsterdam, el Mauritshuis de La Haya, el museo Frans Hals de Haarlem, el Louvre de París; la National Gallery de Londres y la Galería Nacional de Arte de Washington D. C.

Murió en el año 1660, a la edad de cincuenta años. Fue enterrada en una granja a las afueras de Harlem. Ninguna de sus obras de arte se mostró públicamente ni se le atribuyó durante cerca de 200 años.


BIBLIOGRAFÍA

Chadwick, W. “Women, Art, and Society” 1990. Thames and Hudson. Londres.
Harris, A. S. y Nochlin, L. “Women Artists: 1550-1950”. 1976. Los Angeles County Museum of Art, Knopf. Nueva York.

Jolly Toper (1629) óleo sobre lienzo, Frans Hals museum, Haarlem
Jolly Toper (1629) óleo sobre lienzo, Frans Hals museum, Haarlem

 

Judith Jans Leyster