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Pablo D. Santonja | @datosantonja
Las Sinsombrero es el nombre que se le da a un grupo de mujeres españolas que formaron parte de la Generación del 27, pero cuya contribución artística, literaria y cultural fue tradicionalmente ignorada o menospreciada por el hecho de ser mujeres. A pesar de que fueron contemporáneas de figuras masculinas célebres como Federico García Lorca, Luis Cernuda o Rafael Alberti, su trabajo no recibió el mismo reconocimiento. Este término surgió en el siglo XXI como una manera de reivindicar su legado.
El nombre "Las Sinsombrero" tiene un origen simbólico: en 1927, un grupo de mujeres, entre ellas Maruja Mallo y Margarita Manso, decidieron quitarse el sombrero mientras caminaban por la Puerta del Sol de Madrid. En la España de la época, el sombrero era un símbolo de respeto y decoro. Quitárselo en público fue un acto de rebelión que representaba su desafío a las normas sociales, culturales y de género de la época. Este gesto fue interpretado como una reivindicación de libertad individual y artística.
La autora Clara de Frutos nos trae “Vanguardia es una mujer”, una novela gráfica editada con técnica de acuarela, que nos trae la vida y obra de Cóncha Mendez, contando su propia historia desde el exilio
Algunas de las mujeres más destacadas que se incluyen en este grupo son: Maruja Mallo (1902-1995),Margarita Manso (1908-1960), María Zambrano (1904-1991), Rosa Chacel (1898-1994), Concha Méndez (1898-1986s), Josefina de la Torre (1907-2002), entre otras.
El olvido de estas mujeres no solo se debe a las dinámicas que dan privilegio a los hombres, sino también al impacto de la Guerra Civil Española y el exilio. Muchas de ellas tuvieron que huir de España tras el conflicto, y en muchos casos sus obras quedaron marginadas o simplemente olvidadas bajo la dictadura franquista.
El olvido de estas mujeres no solo se debe a las dinámicas que dan privilegio a los hombres, sino también al impacto de la Guerra Civil Española y el exilio
En los últimos años, ha habido un esfuerzo por recuperar sus figuras y darles el lugar que merecen en la historia de la cultura española. Documentales, exposiciones y estudios académicos han comenzado a resaltar su papel dentro de la Generación del 27, y su nombre, "Las Sinsombrero", se ha convertido en símbolo de la lucha por la visibilidad de las mujeres en la historia del arte y la cultura.
En ese contexto, la autora Clara de Frutos nos trae “Vanguardia es una mujer”, una novela gráfica editada por Norma Editorial, con técnica de acuarela, que nos trae la vida y obra de Cóncha Mendez, contando su propia historia desde el exilio, llevándonos por los momentos más importantes de su vida, haciéndonos partícipes del inicio de su trabajo como poeta. La que ha sido su primera novela gráfica, que ha ocupado 7 años de trabajo, se destaca como un potente alegato para dar voz a una parte silenciada de nuestra historia. Clara consigue su objetivo: que te intereses por la vida y obra de cada una de las protagonistas que llenan estas páginas. Así la autora da pequeñas pinceladas para dejar con la intriga al lector, que irremediablemente irá a googlear el nombre de todas las implicadas para descubrir su historia.
