3 de septiembre de 2009, 4:18
NUEVATRIBUNA.ES - 13.5.2009
Nos hemos reunido con los representantes del tejido social organizado en Madrid. Las organizaciones que vertebramos la sociedad madrileña. Aunque Telemadrid no lo diga, hay aún organizaciones sociales que mantienen su fortaleza y su autonomía sin someterse a los designios de un Gobierno Regional cada día más habituado a comprar voluntades, o condenar al silencio y el ostracismo.
Son cientos de organizaciones vecinales, estudiantiles, de jóvenes, de mujeres, de inmigrantes, sindicatos de policía nacional y la Guardia civil, de derechos humanos y cooperación al desarrollo, culturales, ecologistas. Más de 400 organizaciones sociales madrileñas que comparten con los sindicatos de clase, CCOO y UGT, las reflexiones y propuestas que nos llevan a la convocatoria por la Confederación Europea de Sindicatos, en la que participaremos trabajadores de toda la península ibérica, portugueses, españoles y de Andorra, y en la que reivindicaremos lo mismo que el resto de trabajadores europeos en las manifestaciones que recorrerán Bruselas, Berlín o Praga, en días sucesivos.
Reivindicaciones que tienen que ver con la necesidad de políticas compartidas por los gobiernos europeos para alcanzar la recuperación económica sobre la base de un tejido económico más sólido, más innovador en sus productos, de más calidad en sus servicios, con un empleo más estable y más cualificado. Salarios justos, pensiones adecuadas, servicios públicos de calidad. Todo lo que contribuye a un horizonte de vida digna para millones de familias europeas y de trabajo decente para las trabajadoras y trabajadores europeos.
Reivindicaciones que exigen responsabilidad para situar la política sobre la economía y la democracia sobre los mercados. La libertad del mercado no puede ser obstáculo para el respeto a los derechos laborales y sociales, la igualdad de remuneración y trato.
Cuantos nos hemos reunido somos conscientes de que, sin una regulación efectiva de los mercados financieros, será imposible una distribución equitativa de la riqueza. El crecimiento de los mercados financieros a lo largo de los últimos 20 años, la economía de casino, supone un modelo que, enriqueciendo abusivamente a unos pocos, actúa como depredador del planeta y como generador de desigualdades, pobreza, injusticia.
No serán quienes han generado este desastre quienes nos van a sacar de él. No es la política en un solo país la que nos sacará del marasmo de una globalización de los mercaderes. Es el movimiento sindical mundial, articulado en torno a la Confederación Sindical Internacional (CSI) y en el ámbito europeo la Confederación de Sindicatos (CES), quien debe intentar superar esta crisis situando el empleo y las personas en el centro de las preocupaciones políticas.
El día 14, Madrid se convertirá en la capital de los trabajadores y de la sociedad europea. Un hito más en la larga batalla que nos espera. No tenemos miedo, somos prudentes, preferimos negociar los cambios necesarios, pero nos opondremos firmemente a rearmar y reconstruir la bomba que acaba de estallar. El 14, en Madrid tenemos una cita.
Francisco Javier López es Secretario General CCOO de Madrid.
Nos hemos reunido con los representantes del tejido social organizado en Madrid. Las organizaciones que vertebramos la sociedad madrileña. Aunque Telemadrid no lo diga, hay aún organizaciones sociales que mantienen su fortaleza y su autonomía sin someterse a los designios de un Gobierno Regional cada día más habituado a comprar voluntades, o condenar al silencio y el ostracismo.
Son cientos de organizaciones vecinales, estudiantiles, de jóvenes, de mujeres, de inmigrantes, sindicatos de policía nacional y la Guardia civil, de derechos humanos y cooperación al desarrollo, culturales, ecologistas. Más de 400 organizaciones sociales madrileñas que comparten con los sindicatos de clase, CCOO y UGT, las reflexiones y propuestas que nos llevan a la convocatoria por la Confederación Europea de Sindicatos, en la que participaremos trabajadores de toda la península ibérica, portugueses, españoles y de Andorra, y en la que reivindicaremos lo mismo que el resto de trabajadores europeos en las manifestaciones que recorrerán Bruselas, Berlín o Praga, en días sucesivos.
Reivindicaciones que tienen que ver con la necesidad de políticas compartidas por los gobiernos europeos para alcanzar la recuperación económica sobre la base de un tejido económico más sólido, más innovador en sus productos, de más calidad en sus servicios, con un empleo más estable y más cualificado. Salarios justos, pensiones adecuadas, servicios públicos de calidad. Todo lo que contribuye a un horizonte de vida digna para millones de familias europeas y de trabajo decente para las trabajadoras y trabajadores europeos.
Reivindicaciones que exigen responsabilidad para situar la política sobre la economía y la democracia sobre los mercados. La libertad del mercado no puede ser obstáculo para el respeto a los derechos laborales y sociales, la igualdad de remuneración y trato.
Cuantos nos hemos reunido somos conscientes de que, sin una regulación efectiva de los mercados financieros, será imposible una distribución equitativa de la riqueza. El crecimiento de los mercados financieros a lo largo de los últimos 20 años, la economía de casino, supone un modelo que, enriqueciendo abusivamente a unos pocos, actúa como depredador del planeta y como generador de desigualdades, pobreza, injusticia.
No serán quienes han generado este desastre quienes nos van a sacar de él. No es la política en un solo país la que nos sacará del marasmo de una globalización de los mercaderes. Es el movimiento sindical mundial, articulado en torno a la Confederación Sindical Internacional (CSI) y en el ámbito europeo la Confederación de Sindicatos (CES), quien debe intentar superar esta crisis situando el empleo y las personas en el centro de las preocupaciones políticas.
El día 14, Madrid se convertirá en la capital de los trabajadores y de la sociedad europea. Un hito más en la larga batalla que nos espera. No tenemos miedo, somos prudentes, preferimos negociar los cambios necesarios, pero nos opondremos firmemente a rearmar y reconstruir la bomba que acaba de estallar. El 14, en Madrid tenemos una cita.
Francisco Javier López es Secretario General CCOO de Madrid.