nuevatribuna.es
18 de julio de 2010, 6:00
NUEVATRIBUNA.ES - 18.7.2010
Durante la preparación a la XVIII Conferencia Internacional sobre VIH/SIDA, que se celebra en Viena, un grupo de expertos internacionales se pronunciaron sobre la Guerra contra las Drogas a través de la llamada "Declaración de Viena". Con ella pretenden llamar la atención de gobiernos y encargados de las políticas nacionales sobre este tema: "No hay evidencia que mayor fiereza en la aplicación de la ley reduzca significativamente la prevalencia en el uso de drogas".
El grupo está integrado por personalidades como Françoise Barré-Sinoussi -ganadora del Nobel de Medicina en el 2008 por el descubrimiento del virus de la Inmunodeficiencia Humana junto con Luc Montagnier-; Michel D. Kazatchkine -director ejecutivo del Fondo Global para la Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria- y Julio Montaner -presidente de la International AIDS Society-.
Según el documento, "está creciendo el número de países donde se inyectan drogas ilegales, siendo las mujeres y los niños cada vez más afectados".
El VIH se está extendiendo rápidamente en regiones como Europa Oriental y Asia Central, donde el contagio puede llegar al 70% entre personas que se inyectan drogas.
Para este grupo de expertos, es evidente el fracaso de la prohibición de drogas para reducir su producción y consumo y ha causado confusión en el público y costado un número incontable de vidas, por lo que exhortan a buscar alternativas para abordar el problema del consumo basadas en la evidencia y sin las limitaciones de la ideología o los prejuicios.
Las peticiones de la Declaración de Viena se dirigen a los organismos internacionales y la propia ONU. Según el documento publicado en Internet, se solicita:
Emprender una revisión transparente de la efectividad de las actuales políticas de drogas.
Implementar y evaluar un enfoque empírico de salud pública, que encare los estragos individuales y de la comunidad provenientes del uso de drogas ilícitas.
Despenalizar a los consumidores de drogas, aumentar progresivamente las opciones de tratamientos de dependencia, basados en pruebas, y se supriman los centros de tratamientos obligatorios, ineficaces, que violan la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Que categóricamente se apoye y amplíen los fondos para la implementación de un paquete exhaustivo de intervenciones VIH enunciadas en la Guía de Objetivos de OMS, ONUDD y ONUSIDA.
Que se involucre, de manera significativa, a la comunidad afectada, en el desarrollo, monitoreo e implementación de servicios y políticas que impactan sus vidas.
Entre los firmantes de la declaración, figuran el ex presidente brasileño, Fernando Henrique Cardoso, el ex presidente mexicano Ernesto Zedillo (1994-2000) y el colombiano César Gaviria (1990-1994).
Durante la preparación a la XVIII Conferencia Internacional sobre VIH/SIDA, que se celebra en Viena, un grupo de expertos internacionales se pronunciaron sobre la Guerra contra las Drogas a través de la llamada "Declaración de Viena". Con ella pretenden llamar la atención de gobiernos y encargados de las políticas nacionales sobre este tema: "No hay evidencia que mayor fiereza en la aplicación de la ley reduzca significativamente la prevalencia en el uso de drogas".
El grupo está integrado por personalidades como Françoise Barré-Sinoussi -ganadora del Nobel de Medicina en el 2008 por el descubrimiento del virus de la Inmunodeficiencia Humana junto con Luc Montagnier-; Michel D. Kazatchkine -director ejecutivo del Fondo Global para la Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria- y Julio Montaner -presidente de la International AIDS Society-.
Según el documento, "está creciendo el número de países donde se inyectan drogas ilegales, siendo las mujeres y los niños cada vez más afectados".
El VIH se está extendiendo rápidamente en regiones como Europa Oriental y Asia Central, donde el contagio puede llegar al 70% entre personas que se inyectan drogas.
Para este grupo de expertos, es evidente el fracaso de la prohibición de drogas para reducir su producción y consumo y ha causado confusión en el público y costado un número incontable de vidas, por lo que exhortan a buscar alternativas para abordar el problema del consumo basadas en la evidencia y sin las limitaciones de la ideología o los prejuicios.
Las peticiones de la Declaración de Viena se dirigen a los organismos internacionales y la propia ONU. Según el documento publicado en Internet, se solicita:
Entre los firmantes de la declaración, figuran el ex presidente brasileño, Fernando Henrique Cardoso, el ex presidente mexicano Ernesto Zedillo (1994-2000) y el colombiano César Gaviria (1990-1994).