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El Club Abierto de Editores (CLABE) celebró este lunes la II Jornada contra la Desinformación bajo el lema “Comprometidos con la Verdad”. El encuentro reunió a expertos académicos, representantes políticos y del sector de la comunicación para abordar las estrategias necesarias en la lucha contra la desinformación.
El presidente de CLABE, Arsenio Escolar, subrayó la grave amenaza que supone la desinformación para el periodismo, la sociedad y la democracia en su conjunto. "La desinformación es un mal estructural que amenaza la democracia" y que “está erosionando la credibilidad de los medios”, dijo.
Escolar destacó que, tradicionalmente, los periodistas han mantenido como un principio fundamental que "las opiniones son libres, pero los hechos son sagrados", pero en los últimos años, este principio ha sido erosionado. "Algunos han decidido que también podían convertir los hechos en libres, rehacerlos, buscarles verdades alternativas, desinformar, mentir", advirtió.
"Los de la prensa nos hemos ganado a pulso nuestra mala prensa"
Asimismo expresó la gran preocupación que este fenómeno ha generado en el sector editorial, ya que la prensa vive de la reputación y credibilidad que tiene ante sus lectores. Si la desinformación continúa extendiéndose, "su basura acabará salpicando al conjunto del sector" y el público podría perder la confianza en todos los medios de comunicación. Según Escolar, el prestigio del periodismo se ha deteriorado significativamente, lo que se refleja en encuestas que muestran una creciente desconfianza hacia los profesionales del sector. "Los de la prensa nos hemos ganado a pulso nuestra mala prensa", reconoció.
El problema de la desinformación, según Escolar, se ha agravado debido a dos factores. En primer lugar, la velocidad y eficacia de expansión de las falsedades ha aumentado debido al mal uso de la tecnología y las redes sociales. En segundo lugar, actores antes considerados honorables, tanto en la política como en los medios, han caído en la tentación de emplear la desinformación como una herramienta habitual. "Que las opiniones sean libres y también los hechos sean libres, no sagrados, es una tristísima y devastadora novedad", lamentó.
Finalmente, Escolar hizo un llamamiento a la acción urgente y coordinada entre políticos y medios de comunicación para detener la desinformación antes de que cause un daño irreparable a la democracia. Propuso que los medios se autorregulen y adopten códigos éticos, mientras que los políticos deben establecer normativas que, sin coartar la libertad de prensa ni de pensamiento, pongan fin a la "libertad de injuria, de mentira y de hechos alternativos". También instó a no dejar fuera de esta regulación a las plataformas tecnológicas y redes sociales, que a menudo permiten la propagación impune de falsedades.
Durante la jornada se presentó el libro Comprometidos con la Verdad. Propuestas para la lucha contra la desinformación, coordinado por el profesor de la Universidad Carlos III de Madrid, Raúl Magallón. Asimismo, se lanzó el portal web 'Comprometidos con la verdad', que recoge informes y noticias sobre el tema, junto con una declaración de compromisos ya respaldada por casi 50 organizaciones.
El acto contó con la intervención de la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, y el ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López, quienes reivindicaron el derecho constitucional a una información veraz y defendieron las libertades democráticas en un entorno mediático cada vez más complejo. Ambos subrayaron la importancia de luchar contra la desinformación, que López calificó de "amenaza para las democracias", aludiendo a las nuevas tecnologías como aceleradores de la propagación de bulos.
Entre los momentos más destacados, también se incluyó un debate sobre propuestas legislativas contra la desinformación, con la participación de representantes de distintos grupos parlamentarios. La iniciativa Comprometidos con la Verdad fue presentada por Juan Zafra, director general de CLABE, y Miguel Escassi, director de Relaciones Institucionales de Google España.
La jornada concluyó con una mesa de medios en la que participaron Virginia P. Alonso (Público), Manel Manchón (Metrópoli Abierta) y Fernando González Urbaneja (Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo), quienes debatieron sobre el rol de los medios en este desafío. La clausura corrió a cargo de Francina Armengol, destacando la necesidad de mantener el foco en la veracidad informativa como pilar de la democracia.
