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Pablo D. Santonja | @datosantonja
Simón Grossmann es un nombre que resuena con fuerza en la escena indie latinoamericana. Nacido en Caracas, Venezuela, este joven cantautor ha sabido ganarse un lugar en la música gracias a su estilo único, que mezcla el indie-folk con influencias latinas y pop. Sus canciones están cargadas de letras íntimas y melodías relajadas que conectan con una audiencia que busca algo más que lo comercial: buscan autenticidad, buscan cercanía.
La vida de Simón, llena de diversas influencias culturales, le ayudó a encontrar el ambiente perfecto para desarrollar su carrera
La vida de Simón, llena de diversas influencias culturales, le ayudó a encontrar el ambiente perfecto para desarrollar su carrera. Desde joven, estuvo expuesto tanto a la música anglosajona como a la latina, y esa mezcla de sonidos se refleja claramente en su estilo. Sus referentes e influencias vienen de la lectura, el cine o músicos como Jorge Drexler, Rosalía, Danny Ocean, Los Beatles, entre otros. “Aunque muchas veces trato de componer de forma consciente, no espero a que llegue la inspiración, que sería lo puro, sino trabajo toda la información que manejas a lo largo del día, para obtener algo más diverso”, afirmó a la revista.
Grossmann ha sabido construir un sonido que es difícil de encasillar en un solo género, pese a que él se siente cómodo en la etiqueta “música indie - latina”. Canciones como "Agüitaecoco" y "Limón y Sal" reflejan esa frescura que lo caracteriza, con letras que hablan de la cotidianidad, el amor y la nostalgia, acompañadas por melodías que invitan a la calma.
En su disco debut "Ciclo" (2017), Grossmann mostró una capacidad innata para transmitir emociones de manera sencilla pero efectiva, donde con casi veinte años, inició un proceso de creación puramente innato con la inocencia de no saber si algún día viviría de esto. Años después, con la confianza de probar cosas nuevas, ha conseguido plasmar la naturalidad con la que transforma lo cotidiano en su arte. Sus letras no son pretenciosas, sino que exploran lo común: una conversación, una tarde en la playa, la sensación de extrañar un lugar o a una persona. Pero es precisamente esa sencillez la que permite a su audiencia conectar profundamente con él. Para ejemplo nos sirve su próximo single: “Te hice un reggae”, donde habla de los celos. “Quería plasmar que todas estas inseguridades están en tu cabeza, y necesitaba hacer un mantra, algo divertido”, nos comenta. “Tiene esa vibra de mar, de playa”.
En la entrevista, Grossmann ha mencionado que su proceso creativo está influenciado por las emociones que experimenta día a día. Para él, escribir música es una forma de procesar la vida, de encontrar sentido en las pequeñas cosas. "No busco forzar una canción".
Simón Grossmann ha demostrado que la música no necesita ser compleja para tocar el corazón de la gente
Simón Grossmann ha demostrado que la música no necesita ser compleja para tocar el corazón de la gente. A través de su sencillez y su sensibilidad, ha logrado construir una carrera basada en la honestidad artística, algo que no siempre es fácil de encontrar en la industria actual. Su capacidad para mantenerse fiel a sí mismo, mientras continúa evolucionando como artista, es lo que asegura que su música seguirá resonando con nuevas audiencias en los años por venir.
Simón Grossmann es un artista que representa el cruce de culturas, emociones y sonidos. Ha logrado crear una propuesta musical que trasciende fronteras, por lo que podemos contar con él dos fechas consecutivas en Barcelona (Razzmatazz) y Madrid (WiZink Center) el 24 y 25 de Octubre respectivamente, con un show completamente nuevo, con música y visuales nuevos, donde Simón promete una gran fiesta donde bailar, con alguna sorpresa preparada para los fans. Seguro que no falta en su repertorio “Amor Nuevo”, “Daikiri” o “Pienso”, canciones que, verbaliza, son las que más disfruta tocar en sus conciertos. “Lo mejor de la música sin duda es poder compartirla. Enseñarla a gente que dedicó su tiempo y dinero en ver lo que haces”.
Sin duda, un artista que se muestra cercano y consciente del mundo que le rodea, con amor por la música, cuyo próximo disco está a la vuelta de la esquina y pronto sabremos de él.
