A estas alturas de la película del post-20D los barones del PSOE –o al menos una parte de ellos con Susana Díaz a la cabeza– deben tener un disgusto morrocotudo.
Hay que dejar de llamar violencia de género a lo que es terrorismo psicológico o machista, que lleva aparejado a veces agresión física y, a veces, criminal.
Con la victoria del 'no' en Grecia, el gobierno de Tsipras negociará desde una posición de fuerza si demuestra, además, que no tiene miedo a una posible salida del euro.…