Soy de los que piensan que la gran crisis financiera global que comenzó en 2008 ha puesto en cuestión el sistema capitalista y, más en concreto, supone el final de su etapa neoliberal
En Brasil, a la mitad del electorado le importa un carajo la democracia y consideran aceptable cualquier sistema dictatorial con tal de acabar con la izquierda