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León

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  1. BASILICA DE SAN ISIDORO
  2. LA CATEDRAL DE LEÓN
  3. LA CASA DE BOTINES
  4. EL PALACIO DE LOS GUZMANES
  5. EL CONVENTO DE SAN MARCOS
  6. EL MUSEO DE ARTE CONTEMPORANEO

BASILICA DE SAN ISIDORO

Es uno de los conjuntos arquitectónicos de estilo románico más destacados de España, por su historia, arquitectura, escultura, y por los objetos suntuarios románicos que se han podido conservar. Presenta la particularidad de tener un Panteón Real ubicado a los pies de la iglesia, con pintura mural románica y capiteles excepcionales, todo lo cual hace que sea pieza única del mundo románico de la época. El conjunto fue construido y engrandecido durante los siglos XI y XII.

En su origen fue un monasterio dedicado a San Pelayo, aunque se supone que anteriormente se asentaba en sus cimientos un templo romano. Con el traslado de los restos de San Isidoro, obispo de Sevilla, Doctor de las Españas a León, se cambió la titularidad del templo.

El edificio de la iglesia conserva algunos vestigios románicos de la primera construcción de Fernando I y Sancha. El Panteón y las dos puertas de su fachada sur, llamadas Puerta del Cordero y Puerta del Perdón, más la Puerta Norte o Capitular, son las primeras manifestaciones del arte románico en los territorios leoneses. Con el transcurso del tiempo se hicieron modificaciones y añadidos góticos, renacentistas y barrocos. Es Monumento Histórico Artístico, desde el 9 de febrero de 1910.

El edificio actual tiene tres naves y planta de cruz latina. El ábside central es del s. XVI, hispano-flamenco; sustituyó al románico, cuya planta puede verse porque, a raíz de las excavaciones, se dejó una marca trazada en el suelo de la capilla mayor. Los ábsides laterales son románicos con bóveda de horno. Las modificaciones tuvieron que adaptarse al anterior edificio de Fernando y Sancha, por lo que sus ábsides no tienen la misma anchura ni el mismo eje que las naves.

La nave central es de gran altura y está cubierta con bóveda de cañón mientras que las laterales tienen bóveda de arista. Los arcos de separación de las naves tienen un peralte muy acusado; los del crucero son polilobulados, detalle de supervivencia de la época mozárabe.

Sólo se pueden ver desde fuera la fachada meridional y el ábside meridional. El resto del edificio está rodeado por otras construcciones y la parte de poniente está oculta por la muralla (a excepción de la torre). Desde el exterior se aprecian las tres alturas de las naves. La cornisa de la nave central es ajedrezada y se apoya en modillones de influencia mozárabe.

Las dos portadas románicas corresponden a esta fachada. La más antigua es la del Cordero y la más moderna, la del Perdón. Son dos ejemplos del románico pleno, lo más antiguo que se construyó en el reino de León.

Puerta del Cordero

Está dividida en dos cuerpos: el superior compuesto por peineta barroca y rematado con San Isidoro a caballo.

Puerta del Cordero

En la portada propiamente dicha hay dos arquivoltas de medio punto con molduras de baquetón sobre columnas. Una tercera arquivolta dovelada descansa sobre jambas, rodeada de moldura ajedrezada. Entre las arquivoltas hay tres molduras con roleos y palmetas. Las columnas están acodilladas y tienen basas áticas sobre plintos muy altos. Los capiteles presentan figuras humanas con garras en lugar de pies y manos, personajes alados, en cuclillas y entre vegetales.

Tímpano del Cordero

Es el primer tímpano conocido del Reino de León, conteniendo diversas escenas. Pertenece al románico pleno del siglo XI. Está esculpido en mármol blanco y se apoya en jambas que están rematadas por cabezas de carnero.

Tímpano de la Puerta del Cordero

Se representa el Sacrificio de Isaac con el cordero místico sujeto por dos ángeles, y a ambos lados otros dos ángeles portadores de los símbolos de la Pasión de Cristo. En la Hispania mozárabe era muy común representar la escena del sacrificio de Isaac en lugar de Cristo crucificado.

A la derecha se ve a Sara en la puerta de la tienda y los dos sirvientes que tomó Abraham como compañía, uno montado a caballo y otro que se descalza respetuosamente porque va a pisar un lugar sagrado. Isaac está también descalzo y pueden verse sus sandalias en el suelo.

Detalle “Dextera Domin”i

Abraham, también descalzo, escucha la voz que llega desde el cielo, simbolizada en la “ Dextera Domini”. El cordero del sacrificio está en un matorral y detrás de él hay un ángel que habla. Es una representación que concuerda con el texto de Génesis, exceptuando la figura de Sara. En el lado de la izquierda hay otras dos figuras del Génesis: Ismael y su madre Agar. Ismael está representado como tirador de arco:

“Y Dios estaba con el muchacho; y creció, y habitó en el desierto, y fue tirador de arco”. (Génesis 21:20).

Todo el relieve está ejecutado en piedra procedente de la región. En las enjutas del arco hay relieves y figuras en mármol reutilizadas. Se cree que estuvieron dispuestas de otra manera y que al restaurar la puerta se movieron olvidando su primitivo lugar. Por eso la estatua del mártir Pelayo tiene un libro que correspondería a la estatua de San Isidoro, a cuyo costado se implantó un verdugo con el cuchillo, correspondiente en realidad a Pelayo.

San Isidoro tiene junto a la cabeza la inscripción Isidorus. En el museo de San Marcos hay otra estatua compañera de ésta que corresponde a San Vicente de Ávila, cuyas reliquias se trajeron también en 1063. Por encima de San Isidoro se ven los relieves de David y cinco músicos, más un violinista dentro de círculos concéntricos. Sobre Pelayo hay otro violinista igual, más un tamborilero.

Por encima de estos personajes hay un friso interrumpido por la rosca externa de la arquivolta que representa los símbolos del zodíaco ordenado de derecha a izquierda. Fueron identificados con sus nombres, unas inscripciones con caracteres de la segunda mitad del s. XI de las que aún quedan.

Puerta del Perdón

Puerta del Perdón

Se llama así porque era la puerta por donde entraban los peregrinos que iban haciendo el Camino de Santiago, para conseguir en esta iglesia las indulgencias correspondientes y el perdón de los pecados.

Se abre en la fachada sur del crucero. Pertenece a la época del románico pleno, y sus relieves están atribuidos al maestro esteban, que trabajó en las catedrales de pamplona y de Santiago de Compostela. Su ejecución es posterior a la Puerta del Cordero. El maestro Esteban esculpió por primera vez una serie de temas evangélicos que serían reproducidos después en la portada de la catedral de Compostela, en la catedral de Pamplona y en la de Toulouse.

Una cornisa ajedrezada divide esta fachada en dos cuerpos. En el cuerpo superior hay tres grandes arcos de medio punto, siendo ciegos los dos laterales. Las columnas del centro son geminadas y sus basas son áticas. El ventanal central está cerrado por una reja románica. El cuerpo inferior está ocupado por la portada propiamente dicha.

Tímpano del Perdón

El tímpano está dividido en tres dovelas que muestran tres relieves diferentes con temas que ya están lejos de toda influencia mozárabe y que artistas anteriores nunca se atrevieron a tratar. Sin embargo, en las enjutas sí se muestra una reminiscencia mozárabe, no por el tema sino por la posición que se da a las esculturas de San Pedro y San Pablo.

A San Pablo se le concede el lugar de la derecha, el preferente, costumbre muy hispánica que también puede verse en Silos. San Pablo en aquella época era muy venerado en España donde todavía se seguía la liturgia hispánica o mozárabe.

Las tres escenas son: AscensiónDescendimiento y Sepulcro vacío que contemplan las tres Marías. Las arquivoltas son de moldura en bocel, muy peraltadas, con columnas acodilladas. Todo está rodeado de una moldura ajedrezada. El dintel se apoya sobre cabezas de león y de perro.

La escena de la izquierda, la Ascensión de Cristo, llama mucho la atención por la forma en que está tratado el tema, ya que parece que Cristo es ayudado o empujado hacia los cielos por los dos Apóstoles.

En el centro se representa la escena del Descendimiento, de gran realismo, acompañada por dos ángeles turiferarios sobre el brazo horizontal de la cruz.

A la derecha se ven a las tres Marías ante el sepulcro vacío cobijado en un arco románico peraltado. Un ángel desarrolla grandes alas que resguardan todo el conjunto.

Estos temas expresados por el maestro Esteban fueron muy extendidos por los escultores del Camino de Santiago, que a su regreso lo llevaron a Francia en una cronología posterior.

Interior del edificio

El templo tiene plante de crus latina gracias a una alargada nave crucero que sobresale de la anchura total del mismo. A ella abren los tres ábsides del mismo, si bien el central fue demolido en el S XVI para edificar el actual en estilo gótico flamenco por Juan de Badajoz "El Viejo". El retablo que ocupa la cabecera del mismo también es del S XVI.

A pesar de haberse demolido el cilindro absidal central persiste su presbiterio en el que se aprecia la existencia de dos pequeños absidiolos en el espesor de cada uno de los muros laterales. Se hallan precedidos de una arquivolta enrasada con el paramento, a base de arco de medio punto, capiteles historiados columnas y basas.

El interior sorprende al visitante por su intensa luminosidad debido a la gran cantidad de amplios ventanales de la nave central y del crucero sur. Posee una rica decoración en impostas de ajedrezado, motivo que se ve tanto en paramentos rectos como curvos. También los capiteles son ricos y numerosos.

Capilla Mayor

La Capilla Mayor data del s. XVI, y su arquitectura se atribuye a Juan de Badajoz el Viejo. El padre Juan de Cusanza encargó las obras en el año 1513, sustituyendo la antigua capilla románica de la infanta Urraca por la actual gótica. En 1971 se hizo una labor de limpieza y de restauración del suelo, que se hallaba muy deteriorado. Con ese motivo salieron otra vez a la vista los cimientos de la planta románica que el arquitecto Torbado había descubierto en su labor de excavación, y siguiendo su trazado se hizo un dibujo en el suelo para que se pudiese ver fácilmente. La capilla está cubierta por bóveda de crucería con terceletes.

Bóveda de la capilla mayor
Retablo mayor

El retablo de factura aún gótica procede de la parroquia de Pozuelo de la Orden (Valladolid) y fue trasladado a San Isidoro en 1920, año en que esta localidad pertenecía al obispado de León. Fue labrado entre 1525 y 1530, contando con la participación en las labores de talla y ensamblado de un maestro llamado Giralte, y consta de veinticuatro tablas de pintura, atribuidas por Chandler R. Post a un Maestro de Pozuelo, cabeza de serie de un amplio número de obras cuyo centro geográfico se sitúa en la ciudad zamorana de Toro.

La custodia es de plata, del artista M. García Crespo, y guarda la hostia consagrada expuesta día y noche por privilegio papal muy antiguo, que comparte con la catedral de Lugo. Bajo la custodia y en lugar preferente se halla la urnaneoclásica que conserva los restos de San Isidoro, obra que el platero leonés Antonio Rebollo realizó en 1847.

Panteón real

Panteón Real. El tema pictórico corresponde a la segunda mitad del siglo XII

El origen data de los tiempos del rey Alfonso V el Noble que tras el paso de Almanzor hizo levantar de nuevo la iglesia con pobres materiales y la dotó de dos cementerios, uno en la cabecera y otro en los pies como un atrio sin cubrir, dedicándolo a enterramiento regio; allí depositó los cuerpos de sus padres Bermudo II y Elvira. Fernando I y Sancha reconstruyeron también este panteón. Así consta en la lápida de consagración y así lo atestigua el cronista de la época conocido con el nombre de Silense que fue además clérigo de San Isidoro. La historiografía moderna atribuye el resultado final a la infanta Urraca la Zamorana, hija de Fernando I y Sancha.

Fue un espacio cuadrado delimitado por el muro occidental de la iglesia que tenía una puerta de entrada al templo que fue cegada a comienzos del XII con motivo de las nuevas obras de ampliación. Se abrió en compensación otra puerta en el ángulo sur oriental. Este espacio estuvo cerrado por el sur con un muro medianero con los palacios reales. La cámara tiene poca altura lo que le da un falso aspecto de cripta sin serlo. Cuando se cerró la primitiva puerta de acceso al templo quedó una zona que se convirtió en altar dedicado a Santa Catalina de Alejandría y toda la estancia tomó el nombre de capilla de Santa Catalina. En la documentación de la época puede verse este nombre, alternando con Capilla de los Reyes.

Es un cuadrilátero dividido en seis tramos mediante columnas centrales. La estructura es abovedada y está recubierta de pinturas. El tema pictórico corresponde a la segunda mitad del s. XII; sobre fondo blanco se recorta en trazos negros toda la temática y se rellenan los fondos con ocres, amarillos, rojos y grisáceos.

Son muy importantes los capiteles. Los hay con tema vegetal de tradición hispánica mientras que los historiados de tema simbólico parecen de influencia foránea. Son significativos los temas bíblicos pues fueron una primicia del románico.

Tribuna

Según la tradición, la tribuna real era un palco para uso exclusivo de la reina Sancha, esposa del rey Fernando. En el s. XII fue reformada, convirtiéndose en dependencia del palacio de la infanta Sancha Raimúndez, y más tarde, a finales de ese mismo siglo, el canónigo isidoriano Santo Martino la convirtió en capilla de Santa Cruz, y allí tuvo su propio escritorio de trabajo. En el siglo XVI pasó a ser sala capitular, y desde 1962 alberga el museo de orfebrería, siendo también conocida como “Cámara de doña Sancha”.

El espacio está situado sobre el Panteón más el pórtico occidental, compartiendo sus muros y comunicado con ellos por una escalera de caracol. Consta de dos cuerpos rectangulares cubiertos por bóveda de cañón. En el muro oriental hay una portada de arco de medio punto doblado y ligeramente peraltado, que se apea sobre parejas de columnas con capiteles historiados. Su vano está cerrado en la actualidad, y en su lugar se erigió un altar. En el s. XVI fue convertida esta estancia en sala capitular, cuando en la sala capitular antigua se estableció la capilla de la familia Quiñones. Las pinturas murales que todavía quedan son de esta época. Desde 1982 es sede del museo o Tesoro Capitular, con piezas románicas muy valiosas.                              

Cáliz de doña Urraca.Basílica
de San Isidoro de León

LA CATEDRAL DE LEÓN

Fue el primer monumento declarado en España mediante Real Orden de 28 de agosto de 1844. Iniciada en el s. XIII, es una de las grandes obras del estilo gótico, de influencia francesa. Se encuentra en pleno Camino de Santiago.

La catedral de León es conocida sobre todo por llevar al extremo la «desmaterialización» del arte gótico, es decir, la reducción de los muros a su mínima expresión para ser sustituidos por vitrales coloreados, constituyendo una de las mayores colecciones de vidrieras medievales del mundo.

La planta es casi una réplica de la catedral de Reims aunque en formato algo menor. Tiene unas dimensiones de 90 m de larga, 30 m de alta y 29 m de ancha. Dividida en tres naves, de la entrada al transepto, y cinco naves del transepto al altar mayor. La catedral presenta macrocefalia, es decir una cabecera de mayor tamaño que lo común y que le resta algo de profundidad y perspectiva pero a cambio le brinda mayor espacio para los fieles. Las naves de la catedral de León se cubren con bóveda de crucería cuatripartita en tramos rectangulares. El crucero lo hace con una bóveda cuatripartita, que sustituyó a la cúpula barroca del s. XVII en las obra acometidas a finales del s. XIX con el fin de guardar coherencia con el resto de la construcción. En sus muros presenta 125 ventanales, con 1.800 m² de vidrieras policromadas de origen medieval, siendo consideradas de las mejores del mundo en su género. De ellas, destacan el grn rosetón central situado en el pórtico central, entre las dos torres de aguja, así como las de la Capilla Mayor, el transepto norte y la Capilla de Santiago.

  1. Pórtico de N.ª S.ª. La Blanca.
  2. Pórtico de San Juan.
  3. Pórtico de San Francisco.
  4. Capilla de San Juan.
  5. Deambulatorio o girola.
  6. Coro.
  7.  Altar Mayor y Retablo.
  8. Puerta de N.ª S.ª del Dado.
  9.  Capilla de Santa Teresa.
  10.  Claustro.
  11. Capilla de San Nicolás.
  12. Capilla del Conde de Rebolledo.
  13. Capilla de San Andrés.
  14. Capilla de Santiago.
  15. Capilla de N.ª S.ª del Dado.
  16. Capilla del Tránsito.
  17. Capilla del Nacimiento.
  18. Capilla de la Concepción.
  19. Capilla de la Virgen Blanca.
  20. Capilla de la Consolación.
  21. Capilla del Cristo.
  22.  Capilla del Carmen.
  23. Capilla de San Francisco.
  24.  Puerta de la Muerte.
  25. Puerta del Sarmental.
  26. Puerta de San Froilán o de la Reina.

Fachada occidental

La fachada occidental es la principal de la catedral, y por la que normalmente se accede al templo. Consta de un triple pórtico ojival similar al de la catedral de Reims. En las jambas, arquivoltas, tímpanos y parteluces de las portadas se desarrolla un trabajo escultórico de destacado papel en el gótico español, actuando de filtro de la influencia francesa. Encima del pórtico, se sitúa el gran rosetón central, con vidrieras de finales del s XIII. El hastial triangular neogótico actual fue construido por Demetrio de los Ríos a finales del s. XIX durante su restauración, siendo desmontado el anterior plateresco del s. XVI.

Torres

La fachada se encuentra flanqueada por dos torres góticas de 65 y 68 metros respectivamente. El hecho que las torres sean diferentes, en forma y altura, responde a momentos diferentes de la construcción y es bastante típico del gótico. La torre norte o de las campanas fue iniciada en el s. XIII y terminada en el s. XIV, siendo más sobria y maciza, terminada en una aguja cerrada. La torre sur o del reloj se inició también en el s. XIII, pero no fue concluida hasta finales del s. XV, momento en el que el maestro Justín le dio remate. Su estilo es gótico flamígero, con una aguja calada, estando menos acorde con el resto del edificio que su compañera. Las torres de la catedral de León presentan la particularidad de estar adosadas a las naves laterales, en lugar de surgir de ellas. Esto permite la curiosa vista de los arbotantes de las naves laterales desde la fachada occidental.

Portada de la Virgen Blanca o del Juicio Final

Portadas

Realizadas en la segunda mitad del s. XIII, las riquezas de las portadas de la catedral de León la convierten en el máximo exponente de la escultura gótica española. El triple pórtico occidental se encuentra dedicado en los laterales a San Francisco y a San Juan Bautista, mientras la portada principal representa el Juicio Final. La influencia francesa se evidencia en esta portada principal, realizada en torno a 1270. De ésta, destacan los personajes de las jambas y Nuestra Señora La Blanca en el parteluz, hoy sustituida por una copia. Las figuras presentan el naturalismo propio del gótico que se impone sobre el simbolismo y hieratismo románicos. El trabajo de los pliegues en los ropajes, la expresión e individualización de los rostros y la sensación de movimiento son las principales características. El modelo de Nuestra Señora La Blanca o Virgen Blanca destaca por su humanidad, conseguida en gran parte, por la sonrisa que recuerda al Ángel de la Anunciación de la catedral de Reims.

La portada izquierda, en el tímpano se muestra el Ciclo de la Natividad de Jesús: Visitación, Nacimiento, Adoración de los Pastores, Herodes, Epifanía y Matanza de los Inocentes, con un gran sentido narrativo. En las Arquivoltas aparece una alusión del árbol de Jesé, en relación con la genealogía de Cristo e historias relacionadas con la vida de San Juan Bautista, dando el nombre a la puerta. Entre esta portada y la siguiente, aparece el "locus apellationis", columna ante la que se administraba justicia en el Reino de León, según normas que se remontan al Fuero Juzgo y al leonés de 1020, y que provoca la asimilación de Alfonso X, patrocinador del templo, con la figura del rey Salomón, representado al fondo sobre la columna.

La portada central, "de la Virgen Blanca" o del Juicio Final, está presidida por el Cristo Juez que muestra sus estigmas, mientras los ángeles portan los instrumentos de su martirio y la Virgen y san Juan se arrodillan como principales intercesores. Bajo el y en las arquivoltas se desarrolla el juicio en el que San Miguel pesa las almas y separa a los bienaventurados que van al paraíso, de los condenados que sufren los tormentos del infierno, siendo devorados por demonios o siendo introducidos en calderas hirviendo. En las arquivoltas aparecen escenas de la resurrección de los santos. El parteluz de ambas puertas es presidido por una reproducción de la "Virgen Blanca" con el Niño en las manos, siendo la escultura más representativa de la catedral y una de las de más calidad del gótico español. Junto a las puertas, aparecen esculturas de santos, evangelistas y protagonistas del Antiguo Testamento. Destaca la escultura de Santiago cuyo pedestal está gastado, según la tradición, por las manos de los peregrinos a su paso por León de camino hacia Santiago de Compostela.

La portada de la derecha está dedicada a la Virgen, relatando el tímpano la muerte y coronación de María y portando las arquivoltas varios concejos de ángeles, y en el exterior, las cinco vírgenes prudentes frente a las cinco necias. Las jambas albergan figuras de varios profetas de distinta cronología.

Fachada sur

Se extiende hacia Puerta Obispo, orientada al sur del templo. Fue la zona que más sufrió los problemas constructivos de la catedral, llegando a ser reconstruida en varias ocasiones. En el s. XVII, el triforio fue cegado, y se colocó un hastial barroco en forma de espadaña, y el s. XVIII, tras el terremoto de Lisboa su rosetón fue desmontado y sustituido por una ventana doble barroca. Afortunadamente, durante las grandes restauraciones de finales del s. XIX, Matías Laviñaproyectó la fachada actual, construyendo un nuevo rosetón, triforio y hastial neogóticos, imitando la fachada norte, que nunca fue retocada. A la derecha del gran rosetón encontramos la torrecilla denominada "silla de la reina", realizada en els. XV por el maestro Justín, y que servía para recoger los empujes de los arbotantes hacia la cabecera.

Portada del sarmental en la fachada sur, san Froilán preside el parteluz

Portadas (fachada sur)

La portada sur también cuenta con tres pórticos, al estilo de las catedrales góticas francesas, realizados entre 1265 y 1275.

La portada izquierda es la denominada “de la muerte”, por la configuración que acompaña al tamizado heráldico de Castilla y León. No posee decoración en el tímpano, solo en las arquivoltas y jambas. El nombre de Puerta de la Muerte procede de una figura de un esqueleto con alas, colocado en época posterior en una de las ménsulas.

La central es muy similar a la puerta del sarmental de la catedral de Burgos representando a Cristo sedente como Pantocrátor mostrando el Libro de la Ley, y rodeado del tetramorfo: El toro (Lucas), el águila (San Juan), el león (San Marcos) y el hombre (San Mateo). A sus lados aparecen evangelistas sentados, escribiendo sobre pupitres. Ángeles y ancianos del Apocalipsis con instrumentos musicales adornan las arquivoltas. El parteluz está ocupado por una estatua de San Froilán.

La portada derecha, muestra en su tímpano escenas de la vida del santo, su muerte y el traslado de sus reliquias a la catedral leonesa. Las arquivoltas están decoradas con ángeles. Esta portada tuvo gran importancia en la Edad Media pues por ella entraba el obispo, al estar situado enfrente el Palacio Episcopal. Además, también era empleada por todos los peregrinos que entraban por una puerta de la muralla cerca de la catedral para visitar los restos del santo. Actualmente se encuentra cegada.

Fachada norte

Portada policromada de la
Virgen del Dado en la fachada norte,
que da acceso al claustro

La fachada norte de la catedral se encuentra poco visible debido a que se encuentra justo encima del claustro, lo que impide su visibilidad total a no ser desde el mismo o desde las alturas de la ciudad. Consta de un hastial con triforio presidido por un gran rosetón con vidrieras de finales del s. XIII. El remate del hastial triangular y su rosa calada es del s. XV, y fue usado como modelo para la reconstrucción de los hastiales de los lados sur y oeste en las restauraciones de finales del s. XIX. A la izquierda de la fachada está otra torrecilla, realizada en el s. XV para recoger los empujes de los arbotantes hacia la cabecera. Esta fachada no ha sido retocada por las grandes restauraciones, permaneciendo inalterada desde su construcción.

Portadas (fachada norte)

En su origen constaba, como en los casos anteriores, de una portada triple, pero no da al exterior del templo, sino que está cubierta por la estancia de acceso al claustro.

La portada central, llamada "de la Virgen del dado" se llevó a cabo en la última década del s. XIII y aún conserva la mayoría de la policromía, del s. XV. En el tímpano, un Cristo bendice desde la almendra mística que sujetan los ángeles y flanquean los Evangelistas. En el parteluz aparece la escultura de la "Virgen del dado", llamada así por la leyenda sobre un soldado que arrojó sus dados a causa de una adversidad en el juego, hacia el rostro de Niño, que sangró milagrosamente. En las jambas aparecen Pablo, Pedro, Santiago, Mateo y la Anunciación a María.

La portada derecha se usa como entrada y salida a la estancia que da salida al claustro. El tímpano no es escultórico, sino que posee una pintura gótica de la Virgen con el Niño. En las arquivoltas hay figuras vegetales. También conserva la policromía.

Naves

La catedral de León cuenta con tres naves y un transepto. La nave central mide 90 metros de largo y 30 de altura, mientras que las dos naves laterales miden 15 metros de altura, y se unen a través de la girola. Desde el exterior, son perfectamente visibles todos los contrafuertes, los arbotantes y los pináculos a lo largo de las naves, que sirven para desviar los empujes del edificio al exterior y poder perforar las naves con grandes ventanales. También existen gran cantidad de gárgolas, con forma de animales o monstruos míticos, que servía para escupir al exterior el agua que caía del tejado a través de los arbotantes.

Ábside

El ábside es la parte más antigua de la catedral, debido a que las iglesias comenzaban a construirse por la cabecera para poder realizarse culto antes de la conclusión definitiva del templo. La vista de la catedral desde el ábside es una de las más impresionantes, porque es en esta zona donde los arbotantes alcanzan su mayor espectacularidad. Los arbotantes desvían los empujes hacia el exterior permitiendo aligerar los muros, que pueden ser perforados por grandes ventanales. Durante gran parte del año, los pináculos del ábside de la catedral leonesa son usados como posadero y nidos por numerosas cigüeñas. Algunas de ellas pasan el invierno en León.

De cara al exterior lo más importante es el reemplazo de los muros de piedra por los vanos con vidrieras. Las dos naves laterales están perforadas con vanos desde la fachada occidental hasta el transepto, constituyendo los ventanales de la parte baja del edificio. La nave principal está perforada con grandes ventanales que recorren todo el edificio, incluido el transepto y el ábside, dando lugar al claristorio. Justo debajo está el triforio calado que también recorre el edificio. Esta aligeración de los muros es lo que da lugar a la "desmaterialización" del arte gótico. Algunas volutas y adornos que se pueden observar en la piedra entre los ventanales de la nave principal son obra de las restauraciones de finales del s. XIX.

Vidrieras del ábside

Interior

En cuanto a su alzado interior, la catedral sigue con el modelo francés en tres pisos o registros. El primero es el de los arcos formeros apuntados con pilares fasciculares, cuyos baquetones se insertan en los nervios de las bóvedas creando un eje que marca la verticalidad del interior. El segundo piso cuenta con un triforio y el tercero es el claristorio, o conjunto de vidrieras.

Coro

Coro y órgano en la nave central

En León, también según la costumbre extranjera, estaba situado originalmente en la cabecera, delante del altar mayor. En 1746, finalmente fue trasladado al centro de la nave mayor. El arquitecto Cárdenas en 1915 abriría el gran arco central con unos enormes cristales que recuperan, en parte, la vieja perspectiva de la nave central y la vista del altar mayor.

La sillería actual, quizá sustituta de una anterior, fue realizada entre 1461 y 1481 en estilo gótico en madera de nogal. Se trata de una de las sillerías más antiguas de España. Un riquísimo elenco de motivos congrega a los habituales personajes del Antiguo Testamento y a los santos en los lugares más visibles, contraponiéndolos a varias figuras profanas de tono burlesco y costumbrista, a la moda nórdica. Los autores no se recataron en utilizar figuras de clérigos para satirizar vicios, en mordaces escenas que llegan a veces a la obscenidad.

Trascoro

Primeramente un antecoro que miraba a los fieles desde el altar clausurado e inaccesible, fue trazado por Juan de Badajoz el Mozo en estilo plateresco. La obra se remataría entre 1569 y 1590 en plena contrarreforma, elevando su envergadura con imágenes laterales y un gran arco triunfal. Esteban Jordán labró los cuatro relieves de alabastro con escenas de la Anunciación, Nacimiento y Adoración.

Altar mayor

Altar mayor con el retablo recompuesto con tablas procedentes del retablo gótico de Nicolás Francés

El altar mayor o capilla mayor de la catedral está actualmente ocupado por un retablo neogótico montado por Juan Bautista Lázaro con cinco tablas procedentes del retablo perdido realizado por Nicolás francés a mediados del s. XV, y otras de procedencia diversa. Representan la vida de san Froilán, el traslado del cuerpo de Santiago y la Presentación de la Virgen, en una mezcla de estilo gótico internacional y gótico flamenco. Destacan las tablas laterales, en especial el Descendimiento de la izquierda.

En el altar, el arca de San Froilán, obra maestra del platero Enrique de Arfe (1519-1522) con algunas modificaciones barrocas. El altar está cerrado por una verja de estilo plateresco, obra de Juan de Badajoz el Mozo.

Girola y capillas

Girola de la catedral

Alrededor de la parte trasera del altar mayor se encuentra la girola o deambulatorio. En el caso de la catedral de León, como muchas otras del Camino de Santiago, la girola tiene un gran espacio, para permitir el paso de abundantes peregrinos y evitar aglomeraciones. Consta de cinco capillas de forma hexagonal, dispuestas alrededor del deambulatorio, y delimitadas por rejas. Cada una de estas capillas está presidida por un ventanal doble con vidrieras.

Claustro

Vista del claustro catedralicio

La catedral de León fue diseñada sin claustro, pero finalmente se levantó entre finales del s. XIII y principios dels. XIV. Esta construcción cubrió la entrada norte que, desde entonces, quedó resguardada. Este claustro tiene una planta cuadrada de 30 metros de lado, posee seis intercolumnios por lado y 24 pilares en total, respondiendo a las proporciones establecidas en los claustros cistercienses. A su alrededor se agrupan diversas dependencias, entre ellas, el actual Museo Catedralicio.

Los arcos apuntados y capiteles del muro interior presentan escenas bíblicas y de la vida cotidiana, mostrando de nuevo el diálogo de lo divino y lo humano, típico del gótico. Los murales entre las arcadas del claustro fueron pintados con los episodios de la vida de Cristo por Nicolás Francés en el s XV, aunque algunos de ellos son obra posterior de Lorenzo de Ávila y otros.

A comienzos del s. XVI, Juan de Badajoz el Mozo rehízo las bóvedas del claustro. Aprovechó los lienzos y los arcos formeros y montó 28 bóvedas de crucería complicadas y decoradas. Filacterias y medallones presentan un complejo programa iconográfico, vinculado con la Virgen de Regla. Bajo las bóvedas puede observarse una completísima colección de sepulcros que revelan las etapas de la actividad escultórica catedralicia, pero siendo en su mayoría obras tanto del s. XIII como del s. XIV. En el centro del patio y por diversos lugares del claustro se conservan restos de los hastiales oeste y sur, que fueron desmontados durante las restauraciones del s. XIX.

LA CASA DE BOTINES

San Jorge y el dragón, en la fachada. 
Obra de Llorenç Matamala

La casa Botines es un edificio de estilo modernista. Originalmente almacén comercial y residencia particular, fue construido y diseñado por el arquitecto Antoni Gaudí entre 1891y 1894.

El término casa Botines deriva del apellido del fundador de la sociedad, Joan Homs i Botinàs, empresario y comerciante asentado en la capital leonesa, que dirigían Mariano Andrés Luna y Simón Fernández, responsables del encargo de la casa a Antoni Gaudí.

Descripción

El proyecto de Gaudí fue un edificio de estilo neogótico, resuelto con su inconfundible estilo modernista. El edificio sirvió para albergar en sus plantas bajas los despachos y almacenes del negocio de tejidos, y disponía al mismo tiempo de viviendas en las plantas superiores: en la principal los dos pisos de los propietarios, y en las restantes pisos de alquiler; por último, se ubica un desván, con cubierta a cuatro vertientes.

Exterior

La construcción se realizó con muros de sólida cantería caliza, dispuesta en forma de almohadillado. El edificio está flanqueado por cuatro torres cilíndricas rematadas con elevadas agujas de forma cónica, hechas de pizarra, y rodeado de un foso con reja de forja. Las ventanas son de guillotina, con voladizos inclinados para retener la nieve, muy frecuente en el invierno leonés.

Gaudí realizó el foso en unas zanjas corridas rellenas de mampostería hormigonada, como era costumbre enCataluña, por lo que recibió la crítica de varios ingenieros que alegaban que ese sistema no era válido para ese terreno, por lo que la cimentación corría grave peligro.

Detalle del edificio

La fachada es de estilo gótico, con arcos lobulados, y tiene un reloj y una escultura de San Jorge y el dragón, obra de Llorenç Matamala. En 1950, durante unas obras en las que se pretendía sustituir la estatua de San Jorge por una de la Virgen del Camino, patrona del Reino de León, se encontró detrás de la estatua un tubo de plomoque contenía una serie de documentos relativos a la obra, como los planos del edificio firmados por Gaudí, el contrato de propiedad del solar, el acta de conclusión de las obras y unos periódicos locales.

Interior

El interior del edificio presenta un original planteamiento técnico, que no obedece a ningún esquema o patrón y es que en este edificio, Antoni Gaudí ensaya innovadoras técnicas que aplicará posteriormente. De este modo, en la planta baja y en el semisótano, aplicó por primera vez la planta libre, pues sustituyó los tradicionales muros por 28 pilares de fundición de 20 cm de diámetro que hacen de estos dos niveles dos grandes deambulatorios que le permiten conseguir la máxima flexibilidad en la distribución del espacio para las actividades comerciales, una mejor iluminación natural y una constante renovación del aire. Todo ello le hará aplicar la misma fórmula en la casa Milà, aunque esta vez con pilares de piedra.

Desde el punto de vista estructural, Gaudí hace una clara distinción entre muros y pilares. Y es que si en las viviendas tradicionales, los techos se cargan sobre muros convencionales que descansan sobre jácenas de hierro y que tanto sirven para soportar el edificio como para distribuir las plantas, en el semisótano y en la planta baja de la casa Botines, que Gaudí entiende como unidad, sostiene los forjados mediante columnas de hierro colado, una solución que sienta precedente y que es usada hoy de forma mayoritaria en los locales comerciales y en las grandes superficies.

Por todo lo anterior, es evidente que pese a conservar esquemas procedentes del gótico civil, Antoni Gaudí abandona cualquier patrón árabe o mudéjar para la elaboración del edificio, se inclina pues, y sobre todo en lo estructural, a la más pura racionalidad, algo que más tarde desarrollarán Le Corbusier y Mies Van der Rohe.

EL PALACIO DE LOS GUZMANES

El palacio de los Guzmanes es un palacio renacentista del s. XVI situado junto a la Casa Botines en la ciudad de León, España. Su traza se debe al maestro Rodrigo Gil de Hontañón si bien se ocupó de su ejecución Juan de Ribero Rada. A pesar de quedar inconcluso se convirtió en el palacio más destacado de la ciudad.

Palacio de Los Guzmanes.Fachada principal Sede de la Diputación Provincial de León

El palacio tiene planta trapezoidal articulada en torno a un patio interior y esta torreado en sus cuatro esquinas. Su fachada principal tiene un marcado desarrollo horizontal, es de tres alturas separadas por impostas, la inferior tiene ventanas enrejadas, el cuerpo central balcones de los cuales los cercanos a la portada y los situados en las esquinas se coronas con frontones triangulares y semicirculares, y el superior presenta una galería que recorre la fachada hasta las torres formada por arcos de medio punto separados por pilastras corintias. Sobre estas y sobresaliendo de la cornisa se disponen un conjunto de gárgolas.

Las torres tienen una altura más, la última reconstruida en la restauración de 1975 buscando devolverles el aspecto que tuvieron antes de ser desmochadas en 1840. Tres de ellas lucen ventanas angulares y la suroeste lleva adosada una escalera de caracol.

La fachada sur que da a la calle Ancha es de estilo más clasicista. Se relaciona con Juan del Ribero Rada al que también se le atribuyen las ventanas angulares de la torre sudeste decoradas con pilastras dóricas y columnas jónicas y corintias, y la portada abierta a la calle del Cid.

Patio del palacio

La portada principal se abre descentrada siguiendo la tradición medieval hispana. Su diseño es característico del estilo de Rodrigo Gil de Hontañón. Formada por un arco de medio punto, está enmarcada por columnas jónicas sobre las que se apoya el entablamento que sustenta un balcón rematado por un frontón triangular decorado. A sus lados siguiendo la vertical de las columnas, dos guerreros portan los escudos de armas de la familia.

Atravesando el zaguán se accede al patio columnado. Es de dos plantas, la baja formada por arcos escarzanos [1] y apoyados en columnas jónicas que presentan la particularidad de que sus capiteles se muestran de perfil. La superior tiene arcos carnapales sobre columnas corintias. Entre estas los antepechos están labrados con los escudos de los Guzmanes. Los huecos se cubren con vidrieras. Rematan el conjunto gárgolas al igual que en la fachada. En cuanto a su autoría su atribución es dudosa descartándose que se deba a Gil de Hontañón.

En la zona sur del patio se sitúa la escalera claustral de tres tramos sobre bóvedas rampantes. Aunque su estructura es de la época de construcción del edificio lo que podemos ver debe su aspecto a las restauraciones de los s. XIX y XX. Respecto a las dependencias interiores han sido totalmente modificadas en las sucesivas obras llevadas a cabo en los pasados siglos. De los elementos originales ha sobrevivido la chimenea basada en modelos de Serlio que preside el salón principal. La decoración actual a base de cuadros, tapices y vidrieras de temas alegóricos de la historia leonesa corresponde a la etapa en que la diputación se ha hecho cargo del edificio.

EL CONVENTO DE SAN MARCOS

El convento de San Marcos es una de las grandes joyas de la arquitectura de la ciudad. Se encuentra hoy convertido en parador, además de iglesia consagrada y Museo de León, es uno de los monumentos más importantes del Renacimientoespañol.

La fachada

Como ya se ha dicho, es uno de los monumentos más importantes del Renacimiento español. Su fachada es una perla del plateresco español. Es de un solo lienzo con muro de dos cuerpos y dos pisos, rematado en crestería calada y candeleros. El primer cuerpo posee ventanas de medio punto y pilastras platerescas, el segundo balcones y columnas con balaustradas. En el zócalo se presenta medallones con personajes greco-latinos y de la Historia de España (Hércules, Príamo, Héctor, Alejandro Magno, Aníbal, Julio César, Trajano, Judith, Lucrecia,Isabel la Católica, Carlomagno, Bernardo del Carpio, el Cid, Fernando el Católico, Carlos I y Felipe II). En el sobrezócalo se representan cabezas de ángeles. La torre palaciega data del 1711 al 1714. Está decorada con cruz de Santiago y un León y presenta cuatro frisos con entablamento.

Fachada principal de San Marcos de León, desde la plaza

La portada y entrada principal tiene dos cuerpos más peineta de estilo plateresco, aunque en el s. XVIII son añadidos elementos barrocos. En el primer cuerpo hay un gran arco de medio punto con roseta e intradós decorado. La clave es de tipo exaltado representando a San Marcos. Hay medallones con inscripciones bíblicas y un altorrelieve de Santiago triunfante en la batalla de Clavijo. Posee un vano de estilo barroco, con el escudo de armas de Santiago y los del Reino de León. En la peineta están representados el Escudo de armas reales y una estatua de la Fama, obra de Valladolid. Arriba hay un óculo en forma de rosetón coronando la portada.

El claustro

El claustro se divide en dos tramos del s. XVI, obra de Juan de Badajoz el Mozo, en uno de los tramos hay un bajorrelieve obra de Juan de Juni, representando un Nacimiento. Los otros dos tramos son de los siglos XVII y XVIII.

La iglesia

La iglesia es de estilo gótico hispano tardío. La portada está flanqueada por dos torres inacabadas y entre ellas una gran bóveda de crucería. Destacan dos hornacinas, una en cada torre, y en una de ellas se encuentra grabada la fecha de terminación de la iglesia el 3 de junio de 1541. Están representados dos relieves: Calvario con Cruz y Descendimiento de Juan de Juni. El interior presenta una amplia y espaciosa nave, con crucero separado por rejería. En el retablo mayor son destacables: Apostolado y la Anunciación del s. XVIII.

El museo está formado por tres salas, destacando dos de ellas que formaban la antigua sacristía, obra de Juan de Badajoz el Mozo.

En cuanto al coro, la parte baja es obra de Guillermo Doncel (s. XVI), resto del coro es obra de Juan de Juni.

Detalle de la fachada principal del convento de San Marcos

Actualmente, este edificio tiene tres usos:

· Parador Nacional. Este uso se le da desde 1964. El interior del parador de turismo dispone de gran cantidad de muestras artísticas. Pinturas de la escuela flamenca, tallas de madera, muebles recuperados de iglesias y casonas derruidas, tapices, bargueños y obras de época y de artistas contemporáneos como Lucio Muñoz,Vela Zanetti, Redondela, Álvaro Delgado Ramos, Macarrón y Vaquero Turcios.

· Iglesia consagrada desde 1541.

· Museo desde 1869. Enseña valiosas obras como el conocido Cristo de Carrizo del siglo XI, la Cruz de Peñalba o el retablo de la iglesia de San Marcelo.

EL MUSEO DE ARTE CONTEMPORANEO

El Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León, también conocido por sus siglas MUSAC. Creado con el propósito de ser un "Museo del Presente" o "Museo del siglo XXI", su colección y sus exposiciones y actividades están fundamentalmente dirigidas a abarcar el arte actual en sus diferentes manifestaciones.

Abierto al público en el año 2005, tiene su sede en un edificio de nueva planta, que ha merecido un gran reconocimiento internacional con la concesión, en el año 2007, del premio Mies van der Rohe de Arquitectura Contemporánea de la Unión Europea, además de la participación en certámenes y exposiciones desarrolladas por centros de reconocido prestigio mundial.

Vista exterior del MUSAC

Fue inaugurado por los Príncipes de Asturias el 1 de abril de 2005 con un firme propósito: ser un Museo de Presente y convertirse en pieza fundamental en el desarrollo del arte contemporáneo, a nivel internacional. Este museo nació con un amplio sentido experimental a la hora de concebir y desarrollar proyectos y exposiciones a todos los niveles.

El MUSAC forma parte de la Red de Museos Regionales de Castilla y León junto con el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León (situado también en la provincia de León, en la localidad de Sabero), con el Museo Etnográfico de Castilla y León situado en Zamora) y con el Museo de la Evolución Humana en Burgos.


[1] El arco escarzano (denominado también arco corvado es un tipo de arco rebajado simétrico que consiste en un sector circular que posee su centro por debajo de la línea de impostas. Se suele encontrar en los puentes debido a que presenta una mayor sección de desagüe que un arco de medio punto equivalente.