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'Cuentos telúricos': Rodrigo Cortés y la magia de lo inesperado

Cuentos telúricos es una colección de relatos breves que se inscribe dentro del realismo mágico.

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Vicente I. Sánchez | @Snchez1Godotx

¿No es escribir mentirse y mentir a los demás, venderles una mentira, la mejor de las mentiras, la peor, encontrar un hueco en alguna parte, una grieta, dotar de sentido al sinsentido como si tuviera sentido?

No hay mejor manera de explicar qué es Cuentos telúricos que a través de esta reflexión, una de las más intrigantes que Rodrigo Cortés nos regala en su cuento Los fantasmas realmente no existen. En este relato breve y enigmático, casi de forma oculta, Cortés nos ofrece algunas claves sobre el fondo de esta obra, tan maravillosa como indescifrable.

Cuentos telúricos es una colección de relatos breves que se inscribe dentro del realismo mágico

¿Es posible escribir sin miedo? La respuesta que nos da Cortés con este libro es un rotundo sí. Cuentos telúricos es una colección de relatos breves que se inscribe dentro del realismo mágico, donde lo cotidiano y lo fantástico se entrelazan sin miedo a romper las barreras de la realidad. Muchas de sus historias parecen surgir de una escritura libre, espontánea, como si fueran el resultado de una tormenta de ideas improvisada. Libertad absoluta y creativa. Algunos de estos relatos evocan el mundo imaginado de su anterior novela, Los años extraordinarios (2021) y, al mismo tiempo, bien podrían formar parte de alguna escena de su más reciente película Escape (2024).

Rodrigo Cortés es consciente de que posee una pluma refinada, rica en matices y cargada de poesía. Sin embargo, en Cuentos telúricos, publicado por Random House, parece que se aleja deliberadamente de esa complejidad para buscar una ligereza que lo acerca a lo fluido, lo irónico y, en muchas ocasiones, lo divertido. Como ocurre en toda antología, algunos cuentos destacan más que otros (e incluso hay alguno que no me ha convencido), pero en general, es una lectura entretenida, con historias que funcionan muy bien dentro del realismo mágico.

Entre los cuentos más notables, destacaría Mago de verdad, El jurado o Marlon y la tormenta, aunque hay otros absolutamente magistrales, como ¿Se puede?, donde Cortés construye una historia delirante sobre la burocracia y el rol del artista. Este último relato es un claro ejemplo de la influencia del universo kafkiano, presente en varios cuentos que no siempre son fáciles de descifrar.

Uno de los relatos más divertidos y, quizás, más reveladores del libro es Las tres monedas. En él, un padre, al borde de la muerte y con una herencia demasiado escasa para sus tres hijos, decide legarla al que supere una peculiar prueba: les entrega a cada uno una moneda de plata y les dice que el heredero será aquel que logre gastarla en algo que "llene por completo la casa". Con esta premisa, Cortés retuerce el concepto tradicional de los cuentos con moraleja, ofreciendo uno de los relatos más ingeniosos y certeros de todo el libro.

Aunque Cuentos telúricos es un libro breve, con relatos que no superan las 3 o 4 páginas, no es una lectura sencilla. Algunos capítulos requieren pausa, reflexión y, en ocasiones, una segunda lectura. Cortés nos ofrece una obra con mucha más profundidad de la que parece a primera vista, con relatos que sorprenden por su oscuridad y melancolía, como Gente serpiente, un cuento cargado de nostalgia y con un trasfondo perturbador que sacude al lector.