viernes. 28.06.2024

Necesitamos tu ayuda para seguir informando
Colabora con Nuevatribuna

 

Este pasado 19 de junio se conmemoraron los 10 años de la coronación de Felipe VI como Rey de España y se ha engalanado Madrid para festejarlo. 

Pero yo quiero poner mi granito de arena, como madrileña republicana, para todo lo contrario, desprestigiar a dicha institución.

Mi argumento se basa en observar la reunión anual que tuvo el pasado día 12 de junio, del Patronato en la Residencia de Estudiantes, y ver cómo los principales patronos y su presidente de honor que la componen, no asistieron.

Hace justo 38 años se refundó la Residencia, un 12 de junio de 1986, por parte del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), institución franquista que se había quedado con todo lo perteneciente a la Junta para ampliación de Estudios e investigaciones científicas (JAE).

Entre los proyectos que tienen para el próximo año, está la conmemoración de los 150 años de la creación de la Institución Libre de Enseñanza, después de haber destruido en el año 2014, su recinto histórico

Vemos claramente que no tiene la Fundación Residencia de Estudiantes el apoyo de sus patronos que son fundamentales para el funcionamiento de esta Residencia refundada en 1989, Fundación del sector público-privada (se financia con cargo a los Presupuestos Generales del Estado y a las subvenciones). 

Es la primera vez, desde hace casi 30 años que ocurre este acontecimiento catastrófico para dicha institución, me refiero a la reunión anual. No han asistido, los siguientes patronos: ministras de Educación, ministra de Ciencia, ministro de Cultura, presidenta del CSIC y Felipe VI que es el presidente de Honor, pero que no asiste desde el año 2015, casualmente, el año en que la Residencia fue galardonada por el Sello Patrimonio Europeo que da la Comisión Europea. 

Y eso que le llevaron un día antes (como expliqué en otras ocasiones), para que dicho nombramiento se hiciera, a pesar de no tener los requisitos necesarios, como es no haber incluido toda la historia del lugar, durante la guerra civil española, y su refugio antiaéreo, ahora medio destruido. 

Y así pudieron revalidar el sello patrimonio europeo versión intergubernamental, creado en el 2007, por el sello patrimonio europeo, versión comunitaria, creado en el 2014.

Sí asistierona la reunión del Patronato del 12 de junio, en cambio, el ministro de Asuntos Exteriores y los incondicionales: la directora de la Residencia, Alicia Gómez Navarro, el presidente honorífico, José García Velasco, Mercedes Cabrera Calvo Sotelo, Juan Pablo Fusi, y Josefina Gómez Mendoza, todos ellos catedráticos y los dos últimos académicos de las Reales Academias de Historia y Ciencias.

Entre los proyectos que tienen para el próximo año está la conmemoración de los 150 años de la creación de la Institución Libre de Enseñanza, (ILE) después de haber destruido en el año 2008, su recinto histórico, en la calle Martínez Campos, 14, con muchas familias institucionistas, como la mía, en contra, pero con la financiación de Caja Madrid. 

Ahora, tras ese fracaso de la reunión del Patronato de la Fundación Residencia, le toca el turno tomar protagonismo a la parte histórica y arquitectónica, de la guerra civil española, la del Hospital de Carabineros, que se situó en dicho lugar, la del eminente Doctor Luis Calandre Ibáñez y la de todos los que trabajaron en dicho ejemplar hospital, defendiendo la legalidad republicana y que han ocultado desde hace muchos años, y por supuesto reconstruir lo que quede del búnker. Que busquen financiación entre los que se beneficiaron de su destrucción, que son muchos.

Como dice la carta del ministro de Cultura, Ernest Urtasun, que me envió hace poco tiempo, hacer a esa Residencia "lugar de memoria democrática" en base a la Ley de memoria democrática

La Residencia de Estudiantes, presidida por la monarquía, se derrite como un azucarillo