El “superviviente Boris” va a necesitar de sus dotes más afamadas de manipulador para seguir desempeñando el papel principal en el cartel del teatro político británico.
El Brexit blando de May, el Brexit duro de Boris y sus secuaces, el no, pero sí, o depende, de los laboristas, o el Brexit sin Brexit de la élite económica-financiera tienen poco vuelo.
La prensa conservadora británica no parece dispuesta a consentir que el líder del Partido Liberal Demócrata, Nick Clegg, vuelva a llevarse el gato al agua en el nuevo debate electoral…