Han pasado más de dos siglos desde la Revolución Francesa, pero las derechas quieren controlar, al precio que sea, cualquier órgano, cualquier institución del Estado
Lo que verdaderamente se defiende, sin saberlo la mayoría de las veces, es el entramado y la calígine de supervivencia de la monarquía restaurada por el caudillaje, sus intereses y sus paladines.
La reforma de la carta magna es el camino fundamental por el que debemos transitar en la construcción de los consensos entre los territorios que conforman nuestro país.