Todo en la provincia de Soria se sintetiza en torno al Duero, en esa curva de ballesta que con su amarillo profundo y sosegado envuelve con un lazo otoñal a la capital provincial. Un río que glosaron los poetas Antonio Machado (del que este año 2012 se conmemora el centenario de la primera edición de Campos de Castilla) y Gerardo Diego. Soria capital, ciudad de nostalgias, convoca a los amantes de las setas a finales del presente mes de octubre para la celebración de la tercera edición del congreso "Soria Gastronómica": veintiséis restauradores nacionales e internacionales reflexionando en torno al mundo de la micología y sus revoluciones culinarias.
Las cerca de setecientas especies de setas comestibles que despuntan cada año en sus tierras convierten a la provincia de Soria en uno de los territorios más deseados por quienes disfrutan recorriendo bosques y eriales a la búsqueda de estos preciados frutos. El otoño, con su marea de tonos rojos y amarillos, trae a los Pinares Altos del noroeste provincial, allá donde el horizonte se vuelve encrespado y brilla el albar del pino entre bosquetes de hayas y robles, algunas de las piezas más codiciadas: los boletus edulis y pinophilus, y el níscalo, entre otras.El micoturismo se ha convertido así, en los últimos años, en una manera alternativa de encontrarle a las soledades sorianas un punto de retorno gracias al entusiasmo del visitante de fin de semana. Sendas seteras, cursos de iniciación a la recogida, servicio gratuito de identificación de ejemplaress, degustaciones, jornadas gastronómicas y otras propuestas relacionadas con este fascinante mundo que se ha dado cita los próximos días 29 y 20 de octubre en Soria capital en torno a la tercera edición del congreso Soria Gastronómica. Seguir leyendo en Eco-Viajes.com