VENEZUELA

La reflexión de la izquierda latinoamericana ante la tiranía de Maduro

Panel de expertos de la ONU que han participado en las elecciones en Venezuela.

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María Cristina Torrado Ramírez |

Luego de los recientes comicios en Venezuela, surge una profunda tristeza y solidaridad hacia nuestros hermanos venezolanos, que han padecido numerosas violaciones a los derechos humanos perpetradas por el dictador Nicolás Maduro en la República.

El éxodo masivo de Venezuela se ha convertido en el mayor en la historia del continente americano en pleno siglo XXI, con cifras extraoficiales que rondan los siete millones de personas que han huido de un país sumido en la barbarie y la escasez.

En los años 1970, Venezuela contaba con cinco millones de habitantes, pero la migración masiva, especialmente de colombianos en busca de oportunidades laborales debido a la violencia y el narcotráfico en su país, hizo crecer la población de forma exponencial a once millones en tan solo diez años.

Conocida como la "Venezuela Saudí" en los años 1970, el país disfrutaba de opulencia gracias al petróleo, pero la falta de diversificación económica, la corrupción endémica de los partidos políticos y la caída de los precios del petróleo a nivel internacional llevaron a una crisis económica y endeudamiento.

El surgimiento del Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 (MBR 200) fue liderado por Hugo Chávez, quien tras un fallido golpe de Estado en 1992 y su posterior liberación en 1994, llega al poder en 1998 a través de elecciones democráticas.

En 1999 se reformó la constitución por medio de una asamblea nacional constituyente en referéndum, pero a partir de 2013, bajo el mandato de Nicolás Maduro, se instaura una dictadura que reprime los derechos humanos, desconoce la Constitución, violenta la libertad de expresión y demás libertades individuales, generando una crisis humanitaria.

En las elecciones del 28 de julio de 2024, el Consejo Electoral de Maduro se niega a mostrar las actas de votación, lo que viene desencadenando disturbios y críticas generalizadas, poniendo en entredicho la legitimidad de su gobierno y generando tensiones diplomáticas con varios países.

La mayoría de los países vecinos han condenado las acciones de Maduro y su negativa a la transparencia electoral

La actitud de Maduro ha generado repudio en la región y ha expuesto a los gobiernos de izquierda en América Latina, que han sido cuestionados por el apoyo de algunos países como Cuba, Honduras, Nicaragua y Bolivia a un régimen dictatorial que viola los derechos humanos y socava la democracia. La mayoría de los países vecinos han condenado las acciones de Maduro y su negativa a la transparencia electoral. En el juego de geo expansión política que ha decidido propiciar Nicolás Maduro, algunas potencias globales aplauden su nominación.

En este contexto, la izquierda democrática de América Latina debe reflexionar sobre el mensaje que envía la dictadura de Maduro, que atenta contra las libertades, los derechos y la democracia. La represión a las voces disidentes no puede ser tolerada, ni por los connacionales ni por las instituciones internacionales, ante un gobierno que se autodenomina de izquierda, y no puede estar más lejano de este horizonte axiológico, por lo que inequívocamente es una dictadura en la que está sometido el pueblo venezolano.

La izquierda latinoamericana observa con atención lo que ocurre en Venezuela: el auto etiquetamiento discursivo de Nicolás Maduro como de izquierda, socava la credibilidad y las perspectivas de futuro de las fuerzas políticas progresistas de la región.

María Cristina Torrado Ramírez. Abogada. Magister en Derecho Administrativo. Asesora en el Congreso de la República. Colombia