Thriller local, thriller universal
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Demasiados muertos
Autor: Jesús Carlos Gómez Martínez
Editorial: Siníndice, 2024
Páginas: 152
Duración de un fantasma
Autor: Ismael Martínez Biurrun.
Editorial: Aristas Martínez, 2024.
Páginas: 256.
Ya en 2012, Jesús Carlos Gómez Martínez presentó Siniestro Caravinagre y, el pasado año, Noticia del terrible Kiliki Coletas; ahora, el periodista y escritor pamplonés nos regala Demasiados muertos, título del invento que nos hace recordar otra de sus novelas: Solos quedan los muertos, de 2016, parte de una obra caracterizada por su ritmo narrativo y unas historias negras muy propias del mejor thriller. Y también ahora, otro autor pamplonés, Ismael Martínez Biurrun, da salida a otra novela hermana: Duración de un fantama.
Esta segunda novela de actualidad, cuenta igualmente con una historia propia de la novela negra, si bien su estilo es diferente, aunque igualmente atractivo: "Viajaban en busca del hermano de Romana. Doce años antes, Amador Olano había logrado cierta celebridad con el nombre de Sanador de las Almas Tristes. Aseguraba haber creado una psicotecnología revolucionaria (...) y su exclusiva consulta se convirtió en lugar de peregrinaje para clientes de clase alta o simplemente personas desesperadas. Hasta que tuvieron lugar las primeras muertes".
En lo referente a Demasiados muertos, su autor vuelve a disparar sin duda alguna: "Vázquez se había ahorcado hacía tres semanas y, que yo supiese, nadie había dicho una palabra al respecto. Nadie. Ni Helena. Ni la prensa. Ni la radio. Nadie. Wood, por su parte, continuaba en su ciudad natal y había vuelto a la acción: tres cabrones tres le habían atizado a una amiguita suya, prostituta, cómo no, y...". Bueno, tal y como Gómez Martínez reconoce ya en el inicio del relato, esta "es la historia de un asesino".
La novela, en cualquier caso, es más que eso, como Duración de un fantasma es mucho más que la presentación de una entidad fantasmal: "El viento ascendía en rachas desde la playa cercana cuando se apearon frente a la siguiente propiedad de los Olano, y Romana sintió el aguijoneo de unas gotas en la cara. ¿Lluvia, o espuma del mar? (...). En el instante en que pulsó el timbre, unos violentos ladridos le hicieron dar un brinco. El monstruo se agazapaba justo detrás de la puerta.
-Joder. -Romana se tocó el pecho, donde el corazón volaba. Odio los perros -Apretó los dientes con la siguiente andanada de ladridos-. Los odio con toda mi alma".
Después de escuchar una voz de mujer, "Romana volvió a anunciarse. Al cabo de unos segundos sintió la presencia de un hombre al otro lado de la puerta. Arrastraba su voz para ordenar discretamente algo a la mujer, tal vez que sacara de allí al dichoso perro. Después la alzó en dirección a la puerta:
-No queremos hablar con los propietarios, se lo hemos dicho mil veces. Váyanse.
Romana cambió una mirada con Said, que se mantenía a medio camino entre la puerta y el coche (...)".
El triller local cuenta, pues, con dos nuevas novelas escritas por dos autores navarros que han ofrecido incluso al lector interesado en otro tipo de relato, como Solo los vivos perdonan, El escondite de Grisha o Mujer abrazada a un cuervo, caso de Ismael Martínez Biurrun; como Sueños de un cadáver, Sangre negra o Matar es fácil, caso de Jesús Carlos Gómez Martínez. Todas ellas, forman parte de un más que interesante escenario creativo centrado en las andanzas de diferentes asesinos y víctimas de un mundo violento. Muy violento: "Romana se encaramó al taburete acolchado y lanzó una ojeada alrededor. Todo era inofensivo y falso, excepto las personas. Siempre quedan las personas. La rabia y los anhelos".
Triller local, thriller universal, como el del recientemente fallecido e igualmente iruindarra Pascual García, periodista y autor que presentó recientemente Un cadáver en mi ascensor (Eunate), novela muy interesante y emparentada con estas otras que ahora nos ocupan en muchos aspectos.